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19 de abril de 2013

La base científica de porqué el bebé se calma al tomarlo en brazos

El mejor lugar para un bebé que está llorando sin duda son los brazos de su madre, sugieren unos investigadores.

Cuando las madres cogen a los bebés inquietos en sus brazos, ellos experimentan una reacción calmante automática, aseguraron.

Este efecto evolucionario, visto tanto en los ratones como en las personas, refleja un conjunto coordinado de regulaciones centrales, motoras y cardiacas, según el estudio, que aparece en la edición del 18 de abril de la revista Current Biology.

También podría ayudar a explicar porqué los bebés que están calmados comienzan a llorar inmediatamente dejan de tenerlos en brazos. Este conocimiento podría ayudar a aliviar la frustración de los padres, y a prevenir el abuso infantil, aseguraron los investigadores.

"Desde los humanos hasta los ratones, los bebés mamíferos se calman y relajan cuando sus madres los cargan", aseguró en un comunicado de prensa de la revista Kumi Kuroda, del Instituto de Ciencias Cerebrales RIKEN en Saitama, Japón. "Esta respuesta infantil reduce el esfuerzo que la madre siente al llevar al bebé en brazos, y es beneficiosa tanto para la madre como para el bebé".

Cuando los bebés están en brazos de sus madres, tienen más probabilidades de sobrevivir, señalaron los investigadores. Mientras tanto, las madres prefieren mantener a sus bebés calmados y relajados. Es una situación beneficiosa para ambos, enfatizaron los investigadores.

Kuroda notó la misma respuesta calmante en los ratones de su laboratorio. "Cuando agarraba a las crías por la piel de la espalda, suave y rápidamente como hacían sus madres, inmediatamente dejaban de moverse y se hacían compactas. Parecían estar relajadas, pero no totalmente flácidas, y mantenían las extremidades flexionadas", comentó. "Esta respuesta calmante en los ratones parecía similar a la calma que experimentan los bebés humanos cuando sus madres los cogen".

Al estudiar la respuesta de los bebés humanos cuando sus madres los cargan, los investigadores hallaron que sus frecuencias cardiacas se hacían más lentas de inmediato cuando sus madres los cogían en brazos. También dejaban de moverse. Usando unos minúsculos electrodos cardiacos, se halló la misma respuesta en los ratones. También se detuvieron los llantos ultrasónicos de las crías de ratón.

Los autores del estudio dijeron que ciertas áreas del cerebro y del sistema nervioso son esenciales para coordinar esta respuesta al ser cogido en brazos.

Los hallazgos son muy relevantes para la crianza, y podrían desempeñar un rol en el desarrollo de estrategias para prevenir el abuso infantil, plantearon los investigadores. Comprender el llanto desde la perspectiva del bebé podría aliviar la frustración, dijeron. Cuando los padres se sienten menos frustrados, es menos probable que haya abuso infantil.

"Una comprensión científica de esta respuesta infantil evitará que los padres malinterpreten el reinicio del llanto como la intención del bebé por controlar a los padres, como sugieren algunas teorías de la crianza, como el tipo de estrategia de dejar que el bebé deje de llorar solo", apuntó Kuroda. "En lugar de eso, se debe interpretar este fenómeno como una consecuencia natural de los sistemas sensoriomotores del bebé".



HealthDay
Via
MedlinePlus

18 de abril de 2013

La decisión de tener un solo hijo

En las últimas décadas el paradigma de familia ha cambiado. Las clásicas familias numerosas cada vez son menos y es muy probable que alguna de tus amigas también tenga un solo hijo.

Lo cierto es que a pesar de que esto se esté volviendo muy popular, todavía se sigue juzgando las decisiones tomadas por voluntad propia en lo que respecta a la maternidad. Tal parece "el mundo" quiere imponernos que el modelo ideal de familia son de dos hijos a más y como ya lo hemos dicho antes, jamás uno solo o ninguno.

Sin embargo las decisiones de las mujeres sobre el tener hijos o no, les pertenece solo a ellas. Lo mismo tiene que ver con la decisión de muchas de optar por un solo hijo. Nadie debería juzgar el número de hijos que se va a tener. Lo cierto es que aún muchas nos sentimos juzgadas, criticadas y mal vistas.

Es un poco diferente en el caso de las mujeres que por circunstancias ajenas a su voluntad tienen solamente un hijo. A ellas no se las juzga o critica, a ellas se las compadece. ¡¡Que gran error!!. La gente no se da cuenta que con sus comentarios pueden estar sumiendo en la frustración y/o depresión a muchas madres que se imaginaban con muchos hijos y que la vida les ha regalado la oportunidad de ser madres de uno solo. Decimos todo esto porque nos escriben muchas lectoras de todas partes del mundo con sentimientos muy negativos y muy influenciadas obviamente por su entorno más cercano.

Si vives con tu pareja la decisión de tener un solo hijo debe ser tomada por ambos. Nunca llegarán a buen puerto si cada uno quiere por su lado.
Además los expertos advierten claramente una cosa: que una vez que se toma la decisión de no procrear más, hay que vivir con ella y estar dispuestos a enfrentarlo. Pueden llegar dudas de repente, nos pasó a todas en algún momento. Sin embargo nunca tomemos decisiones sin pensar. Nuestro corazón debe ponerse de acuerdo con nuestra razón, cuando eso suceda tomaremos la decisión correcta. Es decir tener un hijo más, o no.

Como padres de hijos únicos no debemos caer en el error de intentar compensar la ausencia de un hermano con cosas materiales o darles atención en exceso. Es preferible darles las oportunidades para interactuar con otros niños de su edad y sin son familiares como primos, es mejor.

Se habla mucho de que los padres de hijos únicos somos sobreprotectores, pero yo creo que eso es muy relativo. Ese riesgo siempre está ahí, para cualquier papá o mamá. No importa cuantos hijos tengamos, uno, dos o tres todos podemos cometer errores. Por lo tanto no debemos establecer diferencias, ni permitir que nos impongan etiquetas.

Tener un solo hijo no debe verse como algo malo jamás!. Para ser madres nos basta con uno. La decisión de una mujer de tener un solo hijo debe ser respetada al igual como la decisión de no tener hijos, o tener más de dos. Ya es tiempo de que el mundo lo entienda y no se nos juzgue equivocadamente.

No somos egoistas por nuestras decisiones en lo que a maternidad se refiere. Tener un hijo es una cuestión de amor y responsabilidad. La felicidad de la familia no tiene nada que ver con el número de integrantes. Se supone que así debería ser...





5 de abril de 2013

¿Cuál es el mejor tratamiento para niños preescolares con TDAH?

Los padres de preescolares en riesgo de desarrollar el trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH) deberían probar primero con el entrenamiento conductual antes de acceder a que se medique a sus hijos.

Un equipo halló que los fármacos mejoraban las conductas de los niños pequeños, pero que les elevaban las posibilidades de padecer trastornos del ánimo y el crecimiento. En cambio, el entrenamiento de los padres para comprender las necesidades de sus hijos logró lo mismo sin efectos secundarios.

"El entrenamiento también ayuda a los padres a sentirse más confiados", dijo la doctora Alison Charach, autora principal del estudio del Hospital para Niños Enfermos de Toronto.

A los niños con TDAH les cuesta prestar atención, son olvidadizos y se distraen fácilmente hasta el punto de tener problemas en la escuela, el hogar y con sus amigos.

Un análisis reciente que realizó el diario The New York Times de las cifras de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC por su sigla en inglés) mostró que al 11 por ciento de los escolares estadounidenses se les diagnosticó el TDAH.

Aunque es difícil diagnosticarlo en los menores de 6 años, Charach consideró importante empezar a orientar a los niños con conductas disruptivas, incluido el TDAH.

"Intervenir inmediatamente a esa edad, mejora la perspectiva de los niños en la niñez y la adolescencia", dijo la especialista.

Pero, en la revista Pediatrics, el equipo de Charach publica que falta información sobre la efectividad del entrenamiento conductual versus el fármaco más usado, el metilfenidato (Ritalina).

Los autores analizaron 55 estudios publicados entre 1980 y el 2011 sobre distintos tratamientos en preescolares con riesgo de padecer TDAH. Identificaron ocho estudios "buenos" sobre el entrenamiento conductual, que consta de 10-12 sesiones para los padres.

"Lo más importante es ayudarlos a comprender a sus hijos y leer sus necesidades", dijo la autora.

Un solo estudio había evaluado el uso de Ritalina en preescolares y había identificado una mejoría conductual similar, pero con riesgo de efectos adversos, como irritabilidad y retraso del crecimiento.

"Los niños a esa edad son más sensibles a los efectos secundarios de la Ritalina", indicó Charach.

Aunque fue difícil comparar la efectividad del entrenamiento conductual y la Ritalina, el equipo llegó a la conclusión de que existen más pruebas de que el entrenamiento es efectivo en edad preescolar.

Thomas Power, director del Centro para el Manejo del TDAH del Hospital de Niños de Filadelfia, dijo que hay muchos casos en los que las sesiones no dan resultado y hay que optar por los fármacos.

Pero, en general, Power, que no participó del estudio, coincidió con los resultados.

"Con el TDAH y los trastornos asociados en edad preescolar y el jardín de infantes, conviene comenzar con el entrenamiento conductual", indicó.

Charach recordó que estudios previos habían demostrado que los padres deben completar el entrenamiento. "Si asisten sólo a la mitad de las sesiones, no obtienen demasiado beneficio", aclaró.

El doctor William Barbaresi, del Hospital de Niños de Boston, señaló también la dificultad para encontrar sitios donde ofrezcan esas sesiones.

La Asociación Estadounidense de Pediatría recomienda que los médicos evalúen a los niños entre los 4 y 18 años si tienen problemas de rendimiento escolar o trastornos conductuales y aconseja utilizar la terapia conductual en niños de 4 y 5 años, y los medicamentos con aprobación de la FDA a partir de los 6 años.


 
FUENTE: Pediatrics, online 1 de abril del 2013

Reuters Health

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