18 de diciembre de 2013

Ni más, ni menos, ¡solo hijos únicos!

La personalidad y comportamiento de tu hijo único no está ligada a su condición. Tu hijo único no tiene porque ser diferente al resto de niños con hermanos, si es que nosotros como padres nos aseguramos de brindarles una educación equilibrada, basada en la disciplina  equilibrada y el amor.

Nadie tendría porque ensalzar en demasía, ni tampoco denigrar o rebajar a los niños que no tienen hermanos, mucho menos compadecerlos porque se piense que son niños que están condenados en el futuro a la soledad.

Pensar así, es pensar que nuestro hijo único no tendrá capacidad para ser un buen amigo e ir creando relaciones interpersonales durante su vida. Lo más probable es que el problema está en nosotros los padres. Busca dentro de ti, dentro de tus propios temores, por ahí puede estar el porqué de ser tan negativos y pesimistas con respecto al futuro de nuestro hijo o hija.

Es verdad que la creencia popular da a pensar que los hijos únicos son más caprichosos y egoístas que el resto, así como que tendrían más dificultad para relacionarse con otros niños, pero esto obedece más a un mito que a la realidad, pues especialistas confirman que no es necesaria la convivencia con hermanos o la rivalidad con estos para que los hijos únicos aprendan a compartir, socializar y resolver los problemas. Si es que tu hijo va al jardín de infancia o al colegio seguro estas de acuerdo conmigo en que ahí aprenden a socializar, a competir y hasta pelear, a veces más de la cuenta.

No ensalzar a los hijos únicos no significa que nos ceguemos a las ventajas que tienen sobre el resto de niños con hermanos, como por ejemplo la capacidad para forjar una autoestima mayor, aprender a manejar mejor los momentos de soledad y fortalecer el carácter.

Esto se debe a que reciben de parte de nosotros los padres atención exclusiva, lo que hace que en el colegio por ejemplo, sean niños con un rendimiento un poco superior al resto. Mi hijo no es la excepción, siempre ha sido el niño más destacado de su clase hasta el día de hoy y no voy a negar que aunque él es un niño brillante por naturaleza, he estado muy pendiente de que sea un niño responsable con sus deberes escolares. 

Pero así como hay ventajas, también existe la parte negativa de ser hijo único, es que existe el riesgo de que los padres volquemos excesivas expectativas en nuestros hijos, llegando a abrumarlos o frustrarlos en ocasiones. Hay que tener cuidado con eso, recordemos que nuestros hijos son niños, no adultos pequeños, no les pidamos más de lo que pueden dar. 

Sin importar la razón por la que tenemos hijos únicos, debemos respetarnos. La maternidad nunca debe ser impuesta, debe surgir del corazón, y si el corazón nos dice que uno es lo que queremos, con uno nos quedaremos.

Solo concentrémonos en que nuestra labor de padres es brindar el cariño y atención que nuestro hijo se merece, sin olvidar que la disciplina en todos los niños es para bien, siempre y cuando se de con amor, con la intención de corregir, nunca con la intención de quitarnos el estrés que llevamos dentro.

Recordemos “ser hijo único no implica ningún problema”, los hijos únicos no son ni mas, ni menos. Ser hijo único es una condición a la que nuestros niños pueden sacar provecho y ser personas felices, con una gran capacidad de dar amor, lo que hará que jamás estén solos, tendrán muchos amigos y algún día formarán su propia familia.

En conclusión, aunque en general se suele pensar que tener más de un hijo ofrece algunas ventajas a lo largo de la vida, ser hijo único no implica ningún problema siempre y cuando los padres no cometamos los típicos errores como un excesivo control, sobreprotegerlos o volquemos todas nuestras expectativas sobre ellos.

Por Mi Hijo Único Blog

9 comentarios:

  1. Hola Anny! Te cuento que te he nominado al Liebster Award! Si deseas recibirlo, puedes dar click aquí: http://madresolohayuna.com/premios-en-el-blog-liebster-award-por-partida-doble/
    Muchos besos :)

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  2. Mi hijo será hijo único no porque me lo diga el corazón, sino por mi edad. Mi hijo tiene 3 años y yo 43. Estoy ligada y aunque sé que es una cirugía reversible, estoy consciente de los riesgos de mi edad. Yo soy feliz teniendo hermanas, sabiendo que están ahí para cuando las necesite. Ojalá mi hijo logre encontrar amorosos hermanos del alma. Me duele mucho que mi hijo sea hijo único, lo sufro mucho. Quiero lograr la resignación, estar conforme, reconciliarme con la vida, pero lloro mucho. Estoy triste.

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  3. Hola Adimati,
    Te saluda un amigo que tiene la condición de hijo único. La verdad es una carga pesada que solamente se puede ver al final de la vida cuando ves que tus padres empiezan a enfermar o a envejecer... pero antes -durante la niñez- no lo ves así pues eres el centro de atención de ellos. Lo que puedes hacer para tu hijo se adapte es socializarlo para que pueda aprende lo que es convivir de alguna manera con otros . Eso ayuda mucho. Por otro lado, entiendo que tienes una cirugía que es reversible. Si quieres un consejo... intenta tener otro hijo, no lo lamentarás y si no se puede quedarás satisfecha por haberlo intentado. Esto por parte de la madre por supuesto, por parte del hijo, la cosa es diferente ... uno siente que no se hizo nada por él y por tanto tienes sentimientos de soledad y tristeza por no tener hermanos. Pero todo esto se soluciona en la adultez cuando hay un diálogo entre madre e hijo y se aclaran las cosas.

    En mi caso particular mi mamá ahora es anciana y nunca me explicó el porqué no pudo tener más hijos y aunque todavía podía tenerlos ya que era fértil . Eso es lo que me duele más, el que no lo haya intentado siquiera y ahora que es anciana tenga que cargar con todo el peso yo solo sin ayuda y con unos tíos que me juzgan porque dicen que no tengo "amor y cuidado" hacia ella . Lo que no conocen es que no tengo ese amor por el resentimiento de este hecho. Por eso te aconsejo que lo prepares, diciéndole el porqué es hijo único y otros sí tienen hermanos. Pero todo a su tiempo.

    Muchas bendiciones para tí !

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  4. André Maguiña19 febrero, 2014 10:48

    Coincido plenamente con lo escrito en el artículo. En mi caso, tengo una niña de 7 años y tanto mi esposa como yo, no deseamos tener más hijos, por diversos factores. Considero muy injusto que se nos juzgue por ser aparentemente "egoístas". Creo que nadie tiene el derecho de juzgar las decisiones que toma una pareja libre y responsablemente, ni siquiera el hijo único. El tener hermanos es como una lotería y nada te garantiza que te lleves bien o mal, o que cuando crezcan y sean mayores de edad no se vean nunca más. Ése es mi caso, en la práctica soy hijo único y mi hermano es un completo extraño. Y, al igual que el último comentario de Anónimo, tengo una carga bien pesada con mi madre anciana y no tengo ningún apoyo de mi hermano. Esa carga la estoy llevando solo y no culpo a nadie de eso. Creo que, en el caso de Anónimo, está buscando un pretexto para afrontar algo que es inevitable, la vejez de los padres, lo cual se da con hijos únicos o con hermanos. En mi caso no tengo esa "carga pesada" con que intenta Anónimo justificar su vida. Asumo lo que me tocó y no me quejo. Como leí en un post de este blog, egoísta sería tener un hijo solamente para que el ´”único” deje de serlo y esté acompañado. Dejémonos de guiarnos por mitos y criemos responsablemente sin juzgar a los demás. El tener hermanos no garantiza nada, pues lo importante es la crianza. Lo ideal sería que los hermanos se llevaran bien, por supuesto, pero como se menciona en el post, no se es más ni menos si se es hijo único. Conozco gente que es hija única, que lleva una vida normal y que no se anda quejando. Finalmente, la base de todo es tener los hijos (o hijo) que se quieran y puedan mantener responsablemente.

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  5. No se si busco un pretexto para justificar el hecho de que sólo quiero un hijo; él tiene 4 añitos, me siento inmensamente feliz y plena de tenerlo en mi vida. Sólo que ahora existe mucha presión por parte de mi esposo y su familia para que tengamos otro hijo, me siento atrapada, me dicen egoísta, floja, y lo peor de todo, que no amo lo suficiente a mi hijo por no querer darle un hermano. Soy una mujer de 26 años, se y tengo claro qué tener hermanos es una bendición, pero también entiendo que quiero darle un vida digna y un futuro mejor a mi hijo y aunque suene fuerte y "egoísta" con un hij@ más estas oportunidades podrian reducirse para mi "hijo único".

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  6. Lo más importante es conservar nuestra esencia y lo que queremos en la vida a pesar de que "el mundo" diga lo contrario. Lo que te indique tu mente y corazón, es lo que debes hacer aunque nademos contra la corriente.
    Te deseo éxito en tus decisiones!
    Anny

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  7. Hola,

    Yo también soy hija única y tal como dices: eso me ayudó a fortalecer mi carácter. En estos tiempos modernos, somos cada vez más comunes los hijos únicos y es muy importante que los padres tengan en cuenta que con su adecuada guía ser hijo único puede resultar muy enriquecedor.

    Besos
    ¡Siempre moderna!

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  8. Hola, tengo 26 años y tengo una nena de un añito y la vdd es la única q quiero tener, muchos me dicen pobre se quedará solita, y eso me da remordimiento porque así como dicen nos consideran egoístas, Much@s hasta q tienen un segundo o tercer hijo se sienten completos y yo sinceramente ya me siento así más q completa, los tiempos están muy difíciles tanto en lo social, seguridad y económico y creo q tener uno es lo mejor.. mi esposo dice que me apoya pero no lo siento sincero a veces y es lo que me hace pensar más las cosas.. no es nada fácil tomar una decisión así , espero q todos en algún momento encuentren tranquilidad con la decisión que tomen o tomaron y sacar provecho de eso por qué el lamentar no remedia lo hecho.

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  9. Yo aún estoy en fase de asimilación. Tengo un hijo de 3 años que llena mi vida, pero como hija única, y habiendo perdido a mis padres, nunca he querido que fuera hijo único, para evitar precisamente este terrible sentimiento de soledad que me asalta desde que mis padres (especialmente mi madre, a la que perdí hace unos meses) no están. Pero después de 2 abortos (ambos tras la muerte de mi madre) y 39 años, no me veo con fuerzas ni con edad para seguir intentándolo. Tengo miedo de obsesionarme con la idea de tener otro hijo sólo por el hecho de curar la hipotética futura soledad de mi hijo cuando, en realidad, lo que trato es de curar la mía, que me temo no tiene remedio hasta que me cure yo sola... Así que agradezco enormemente este blog, y los testimonios que aquí encuentro, que me ayudan un poco a sobrellevar este momento tan duro que estoy atravesando. Un abrazo a todos.

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