Hoy, temprano por la mañana mi hijo me preguntó: "¿mamá, yo no soy el rey de la casa verdad?", no hijo tu eres el principe!, papá el rey y yo la reina le dije. No era por nada en especial la pregunta, tal parece solo queria recordarlo.
Pero yo si recordé que desde muy pequeñito cuando empezó con los berrinches y a querer imponernos su voluntad, su papá y yo siempre le deciamos algo asi: "un momento hijo, aqui en esta casa no hacemos tu voluntad, respetamos tus deseos, pero no estas en posición de imponernos nada. Tú eres como el principe de esta casa y tienes muchos privilegios, pero también tienes deberes y uno de ellos es obedecer a tus papás, así que lo sentimos pero no podemos pasar por alto esto o aquello".
Desde entonces los berrinches fueron cediendo cada vez más hasta casi desaparecer, pues obvio no significa que nunca llore, pero ya la intensidad jamás podria considerarse como una rabieta o un berrinche. Mi hijo es un niño travieso, alegre y muy jugueton, siempre anda ocupado en algo inventando o armando cosas y porsupuesto desordenando la casa. Así que desde que era muy pequeñito le pedia que me ayudará con el desorden que causaba. Recogiamos juntos los juguetes, también nos sentabamos juntos a doblar su ropa limpia y de vez en cuando me ayudaba con algo simple en la cocina.
Desde pequeño tratamos de conducirlo bien, corrigiendo algunas malas actitudes como el de querer controlarnos a nosotros, ahh porque eso tratan de hacer los niños y si no te das cuenta ya lo estas complaciendo en todo. Muchas veces con tal de que tu hijo no llore o no te haga una escenita terminas cediendo ante sus exigencias. Así que lo que nos ha resultado a nosotros es hablarle calmadamente y diciendole cual es su posición en la casa sin olvidar recalcar que el respeto entre todos nosotros es lo más importante.
Se dice fácil todo esto pero la realidad es que en la practica no lo es tanto, mi hijo ya tiene 6 años y hemos logrado mucho con él pero con mucho esfuerzo. Todos podemos lograrlo si reconocemos cual es nuestro papel dentro de la familia y nos respetamos.
Hoy me escribió una mamá al correo contándome de los problemas que tienen ella y su esposo para educar a su pequeño de 4 años y medio y los berrinches que ocasiona. Tal parece cuando ella quiere corregir y poner limites el padre interviene criticando su forma de disciplinar y pasa por alto el mal comportamiento. Situación que le preocupa a ella, lo suficiente como para pedir ayuda. ¿Qué te podemos decir?.
Los padres tenemos autoridad en casa pero no debemos actuar autoritariamente ni mucho menos actuar con permisividad, lo que quiere decir que hay que buscar el punto medio para poner limites pero sin dañar su autoestima, poner limites con amor y amabilidad.
Si ambos padres no trabajan juntos tendremos conflictos, sería como si nuestro hogar fuera un barco con dos capitanes. Por lo tanto es de esforzarse mucho desde hoy que son pequeños. Recuerda que ambos padres tienen que manejar el mismo estilo de crianza para no crearles confusión a los hijos, de lo contrario ellos empezarán erroneamente a buscar “al más bueno".
Delegar responsabilidades desde pequeños los va entrenando a futuro y es una forma de disciplinar, se lo digo yo que lo he comprobado, mi hijo tiene responsabilidades en casa, él no es el rey a quien tenemos que servir todos, por el contrario acorde a su edad va realizando tareas, por ejemplo a sus 6 años hace ya solo su cama al levantarse y luego se asea solo la cara y los dientes, recoge sus juguetes desde hace mucho y esta siempre listo a ayudar.
Los especialistas han descubierto algo que muchos padres todavía no han percibido: que los niños llegan al mundo programados para ayudar y cooperar, asi que como padres tenemos que aprovechar esta tendencia natural para el propio bien de nuestros hijos. Si tu hijo te quiere ayudar cuando percibe o ve que estas ocupad@ no le digas: "tu no puedes hacer esto" porque le quitas la voluntad, si realmente es peligrosa la tarea, pidele que te ayude con otra cosa. De esa forma los motivaras a ser diligente, tener un espiritu colaborador y ser un gran ayudante, cualidades que de adulto son muy valoradas.
Enseñarle a cumplir tareas y funciones en el hogar sin duda es una estrategia disciplinaria, pues como ya le habrás enseñado a cooperar, cuando le delegues una nueva tarea en casa no esperarás un berrinche de su parte. Situación que no se daria si estas acostumbrada hacer todo por el y tenerlo como si fuera "el rey de la casa".
Mi hijito es único, pero no es "el rey de la casa"...es el principe, mi principe!!.
Un saludo para tod@s los que tienen un principe o una princesa en casa.
¡Qué buenos consejos! Yo también he observado en mi hijita que de forma natural recoge sus cosas y es muy ordenada con sólo dos años y medio y hay que aprovechar esa tendencia como bien dices.
ResponderEliminarUn abrazo fuerte desde España, María
P.D. Los príncipes de los cuentos tampoco tienen hermanos ;)
Yo realmente que los niños se sientien satisfechos cuando ayudan en tareas. Fomenta la autonomia, independencia, autoestima y les ayuda situarse en el entorno en el que este.
ResponderEliminarMuy buenos consejos! Tienes mucha razón al decir que los niños, de forma natural, yo lo estoy comprobando con mi hija, que solo tiene 2 años! Siempre que hago algo, viene corriendo y dice "mama me ayudas" (que quiere decir mama te ayudo), y le digo que si, y me ayuda en cosas muy sencillas, como a vaciar los cubiertos del lavavajillas, y cuando lo hace se le ilumina la carita! Es algo genial. :)
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